Presentación Casta Álvarez

Frangon43 1,299 views 30 slides Mar 13, 2017
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Presentación


Slide Content

CASTA ÁLVAREZ
Casta Álvarez, por
Marcelino DE
UNCETA

Es una de las mujeres que destacaron en la defensa
de Zaragoza contra los franceses, demostrando tanto o
más valor que muchos de sus compatriotas varones, una
de las defensoras de la Patria.
Su estampa no pasaba desapercibida, por ir
acompañada de una pica, o según muchos afirmaban, de
una vieja bayoneta enganchada al palo de una escoba, a
modo de lanza..
Tanto en acciones en primera línea, como en las
logísticas de retaguardia, Casta siempre trabajó e increpó
a los que no lo hacían, haciendo gala de un fuerte carácter
por el que era conocida.

Nació en Orán (Argelia) o en Cabañas de Ebro
(Zaragoza) en 1786, hija de labradores naturales de
Figueruelas (Zaragoza).
Sus padres fueron Diego Álvarez y Manuela
Barlo.
Terminados los asedios, sus padres se
negaron a vivir en Zaragoza bajo dominio francés y
marcharon a Cabañas de Ebro (Zaragoza), donde
Casta se casó en 1814 con un acomodado labrador.
Viuda y sola, pasó los últimos años de su vida
olvidada, falleciendo el 29 de abril de 1846 a los 60
años de edad.
Casta era la típica aragonesa, ruda en sus
formas, pero trabajadora y amante de los suyos

HERÁLDICA.

Un lienzo de muralla de oro,
en recuerdo de la presencia romana
en el lugar; dos fusiles con bayonetas
caladas de sable, evocando la Guerra
de la Independencia, así como la
estrella, también de oro, de cuatro
puntas, representado a la heroína
Casta Alvarez por la gran admiración
que siente Cabañas hacia quien
deseó vivir y morir en su tierra.
El esmalte azur está en
relación a las aguas del río Ebro, que
fecunda sus campos y posibilita la
vida. Como timbre se utiliza la corona
del Escudo de España.

Destacó en los asedios a sus 22 años de edad, por
su patriotismo y valor acompañando a los defensores de la
ciudad.
El 5 de junio de 1808 se destaca en la batalla de las
Eras del Sepulcro, junto a la puerta de Sancho.
También estará presente en la defensa del Portillo,
junto a Agustina de Aragón y ayudando a la madre Rafols
evacuando enfermos.
En la puerta del Carmen rechaza, junto a otros
zaragozanos, la peligrosa carga de los polacos ulanos, una
de las mejores caballerías de Napoleón.

January SUCHODOLSKi. La carga de los ulanos polacos
durante la batalla de Somosierra, 1860. Museo Narodowe,
Varsovia

Cuando tras el segundo sitio, y con el general
Palafox gravemente enfermo, se pacta la rendición de la
ciudad, Casta no lo asimila y no deja de insultar, mientras
se oculta, a la comitiva que entrega la ciudad a los
franceses.
Tras la guerra fue condecorada por sus acciones
con el Escudo de Distinción y el Escudo de Defensor de
la Patria por el general Palafox, y además, en 1815 recibió
la concesión fernandina de una pensión vitalicia de cuatro
reales diarios.

Juan GÁLVEZ
y Fernando BRAMBILLA
Grabado de la
serie "Ruinas de
Zaragoza" que muestra a
la heroína.

Juan GÁLBEZ y Fernando BRAMBILA. Casta ÁLVAREZ
Estampa aguafuerte y aguatinta (1812 y 1813)
Inscripción:
"CASTA ALVAREZ. Zaragozana,
una de las mugeres que mas se
señalaron en la defensa. Armada
con una bayoneta que a manera
de lanza llevaba en un palo,
animaba a los patriotas y los
guiaba a los enemigos quando
se aproximaban. Donde dio a
conocer mas su bizarria fue en la
batería de la Puerta de Sancho.
Se la premió con una pensión y
un escudo de honor"

Aquí vivió y murió Casta
Álvarez.
Defensora de la Ciudad de
Zaragoza en sus gloriosos
asedios de 1808 y 1809.
En honor de tan insigne
heroína dedica esta
memoria
La Junta del I Centenario de
los Sitios 1908

El 9 de junio de 1909, una comisión de la Ejecutiva
del Centenario formada por los vocales señores Pano,
Lasierra, Fabiani y Oliver acuden a Cabañas de Ebro para
hacerse cargo de sus restos y trasladarlos a Zaragoza.
A tal efecto, llevaron un sarcófago, igual a los de las
otras heroínas, de madera de cedro con chapas de metal
blanco.
A su fallecimiento fue enterrada envuelta en una
sábana, por lo que sus huesos estaban dispersos entre los
escombros de la fosa, fueron recogidos y colocados en el
sarcófago para trasladarlos a la parroquia donde se
celebró una misa por su alma, con la presencia de todo el
pueblo.
Se descubrió una lápida conmemorativa en la casa
en que había vivido y emprendieron viaje por ferrocarril a
Zaragoza, y dichos restos se depositaron en la sala
capitular del Pilar..

Friso de Casta Álvarez en la
Iglesia del Portillo
El tema de los relieves gira
en torno a episodios de los sitios.
La talla de Fructuoso
Orduña destaca la heroica
participación de las mujeres
zaragozanas.
El 15 de junio de 1808 se
produjo el primer ataque de los
franceses a Zaragoza, en la puerta
del Portillo.
Aparecen la Madre Rafols,
la Condesa de Bureta, Agustina de
Aragón, Casta Álvarez, Manuela
Sancho, María Agustín en actitudes
diversas.

El 15 de junio de 1908 se celebró la misa de
réquiem, con la presencia del Rey, don Alfonso XIII,
miembros del Gobierno, Embajador de Francia y
presidente del Comité Francés de la Exposición,
Cabildo y autoridades locales.
Sobre las cinco de la tarde, desde la basílica del
Pilar, se pone en marcha la comitiva, en un día de
cielo encapotado.
Salen los armones de artillería, cubiertos de
paños negros, sobre los cuales iban los féretros de las
tres heroínas, llenos de flores y banderas. De cada
uno de ellos penden varias cintas que son llevadas
por representantes de todas las clases sociales.

En cabeza, en dos hileras, iban formadas las
niñas de las escuelas municipales cantando el himno
a los Sitios, que acompañaba la música del Hospicio.
El Rey preside la comitiva y como al salir del
templo llueve torrencialmente, alguien hace ver al
monarca lo peligroso de recorrer una ruta tan larga en
estas condiciones, pero él sigue adelante recibiendo
impasible el agua, actitud que hizo aumentar los
aplausos que el pueblo zaragozano le venía
dispensando, y así con lluvia más o menos intensa se
llega a la plaza del Portillo, momento en que cesa de
llover.
Los féretros son portados al interior de la
iglesia.

Alfonso XIII en la celebración del I Centenario

Al llegar el Rey, se le saluda con un inmenso clamor
y entre los acordes de la marcha real, pasando por debajo
de las banderas de los estudiantes cruzadas en su honor,
penetra en el templo.
Entre una muchedumbre enfervorizada, se procedió
a la inhumación de los restos de las tres heroicas
defensoras de Zaragoza en su definitivo enterramiento.
Desde los túmulos a los nichos fueron conducidos:
los de Agustina de Aragón, por los oficiales de artillería
Sres. Royo y Fons; los de Manuela Sancho, por el doctor
Fatás, concejal del Ayuntamiento de Madrid y don Alfredo
Ojeda; y el de Casta Álvarez, por los Sres Álvarez y
Lasierra.

Iglesia y capilla, repletas de público, estaban muy bien
iluminadas, y lucían adornos florales.
Con este acto, Zaragoza rendía tributo a estas tres
mujeres, símbolo del temple y valentía con que las
zaragozanas vivieron los dos famosos Sitios.
Capilla mausoleo de las Heroínas de los Sitios.
Se trata de uno de los proyectos para el Centenario
de los Sitios de Zaragoza, pues se decidió su construcción en
marzo de 1907.
La obra es del arquitecto Ricardo MAGDALENA y se
situó a la derecha del presbiterio, en un amplio espacio
cubierto con cúpula, cuyos adornos fueron dedicados a las
valientes mujeres que se distinguieron en los asedios.
Fue inaugurada por la reina María Cristina el 29 de
octubre de 1908.

Retablo de la Anunciación,
obra del escultor Carlos
PALAO, cuya talla corrió a
cargo de Jaime LLUCH y
Antonio TORRES.

Retablo de la Anunciación,
obra del escultor Carlos
PALAO, cuya talla corrió a
cargo de Jaime LLUCH y
Antonio TORRES.

Basílica del Pilar
Iglesia del Portillo

Un siglo después de los asedios, Zaragoza la
recompensa con el nombre de una calle y llevando sus
restos a la Iglesia de Nuestra Señora del Portillo, junto a
los de Agustina y Manuela Sancho.

Placa de la calle Casta Álvarez, antigua calle Ilarda

Postal conmemorativa del I Centenario de los hechos del 2 de
mayo de 1808. Este lo hizo Luís López Allué. 1908

Mariano BENLLIURE. Monumento a Agustina de Aragón y
Memorial de las heroínas en Zaragoza

La capilla de la Anunciación de la iglesia de Ntra.
Sra. del Portillo está dedicada a honrar la memoria de las
heroínas. Los grandes medallones a izquierda y derecha,
en lo alto, atestiguan el deseo de la Junta del 1
er
.
Centenario de los Sitios, de ... consagrar y dedicar este
monumento en prueba del agradecimiento de la ciudad y
de la Patria.

A LAS HEROINAS / defensoras de Zaragoza en los
Sitios / de 1808 y 1809 / María Consolación Azlor y
Villavicencio, Condesa de Bureta / Agustina Zaragoza -
Manuela Sancho / Casta Alvarez - María Agustín / Madre
María Rafols / Josefa Vicente de Cerezo - Rita López de
Obispo / Clara D´Alzú - Engracia D ´Alzú / Josefa Amar y
Borbón / Joaquina Plazas - Estefanía López / María Lostal
de Sola - Benita Portolés / María Blánquez (la del Santo
Cristo) / Juliana Larena - La mujer de Foj / Catalina
Mondragón - María Artigas / ..... y muchas otras. / Dedican
este Monumento / con ocasión del 1er. Centenario del /
glorioso sacrificio. / LA PATRIA Y LA CIUDAD /
agradecidas.

Marcelino UNCETA. Casta Álvarez, 1875.
Óleo, (227 x 155 cm
Ayuntamiento de Zaragoza
La imagen
representa la iconografía
característica de Casta
Álvarez. Es una mujer
fuerte, ruda, trabajadora.
Porta la bayoneta
como una lanza.
Va vestida con falda
larga y amplia y una blusa
blanca cubierta de un
pañuelo rojo.
El pelo recogido y
una mirada intimidadora.
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