13
La formación de los docentes
sigue siendo uno de los factores
más determinantes para la mejora
competencial del alumnado y, por
ende, una de las prioridades para
un replanteamiento del modelo
educativo.
Especialmente, se requiere una
reformulación de la formación de los
futuros docentes para que adquieran
una filosofía de trabajo en el aula
adecuada a la necesidad actual. Esta
es una asignatura pendiente no sólo
para la adquisición de competencias,
sino para reforzar un perfil de docente
vocacional, motivado e incentivado
para la excelencia en su ejercicio
profesional. Para ello es importante
romper estereotipos y dignificar
la figura de los docentes, así como
también vincular esta formación a la
realidad del aula.
En relación con la competencia
digital del docente, sin duda, cabe
un esfuerzo considerable. Todavía
resultan escasos el tiempo y los
recursos para ello. Esta formación
no sólo implica una capacitación en
herramientas tecnológicas, sino sobre
todo metodológica, que se encamine
hacia nuevos modelos de enseñanza-
aprendizaje del aula, acordes con
los cambios sociales y tecnológicos.
De hecho, más determinante que
la brecha digital, resulta la brecha
actual entre la forma de enseñar y
la forma de aprender de las jóvenes
generaciones.
La preparación de los docentes tiene
que ir también encaminada a generar
una cultura de trabajo y aprendizaje
colaborativo y en red
12
. La noción
individualista de la práctica docente
debe ir perdiendo peso, para generar
una comunidad de trabajo dentro
del centro y con la red educativa. De
este modo, se constituye un entorno
de aprendizaje permanente y se
promueve la creatividad, la flexibilidad
y la agilidad del equipo docente ante
los sucesivos retos del cambio social.
Una cuestión relevante, en el marco
de estas comunidades de aprendizaje
y trabajo colaborativo, es fomentar el
registro y la puesta en común de las
innovaciones, para no perder el capital
experiencial que se ha generado.
Asimismo, una iniciativa interesante
puede ser el mentoring entre
profesores que, aunque siempre ha
sido un recurso contemplado en el
sistema educativo y en varias
iniciativas, su puesta en marcha no ha
sido ni sistemática, ni suficientemente
desarrollada. Por ejemplo, sería
oportuno que docentes jóvenes
(nativos digitales) pudieran ejercer de
mentores tecnológicos de docentes
veteranos, y estos a su vez compartir
sus estrategias de aula con los noveles.
Por último, destacar que es ineludible
para la mejora competencial del
docente, su evaluación por objetivos,
la cual resulta una herramienta
esencial para mejorar el ejercicio
profesional.
12 — Una premisa acorde con el conectivismo, el enfoque
teórico sobre el aprendizaje en la era digital que desde 2004
ha tenido como máximos exponentes a George Siemens y
Stephen Downes.
1
Formación del
profesorado
• Mejora competencial
• Cambio de cultura del
trabajo docente
INNOVACIONES EDUCATIVAS Educar para la Sociedad Digital
T
1
O
0
P
0